Vi “Borgman” (Holanda, 2013) dirigida por Alex van Warmerdam (quien también tiene un papel secundario en el filme). Se trata de la historia de un grupo asesino, liderado por Camiel Borgman (quien toca la puerta de una residencia burguesa y termina viviendo en dicha casa), que se centra en la destrucción de una familia matando a todos los que se interpongan en su camino, sin un propósito claro. Hay películas que dividen a la crítica. Esta es una de ellas. Pero lo que puedo señalar como común denominador es que se trata de una película creativa y bien lograda en cuanto lo estético. El gran debate gira en torno a la trama, enfermiza, horripilante y pérfida. Algunos la elogian por su innovación, creatividad  y la manera en que retrata la psiquis de los personajes. Igualmente, ha recibido aplausos por las actuaciones, rudas y delirantes. Pero otro sector de la crítica, donde me ubico, no deja de señalar que la película no es clara en su desenlace, tiene pasos inverosímiles entre las escenas, deja muchas preguntas abiertas sin dar mayores elementos para que el espectador pueda contestarlas -ni siquiera de manera medianamente plausible-, y el espectador queda con una sensación de revoltura en el estómago. Al final, no sabe quién es Borgman (¿un delirio, un psicópata?) ni se explica el relato inicial con el que inicia la película. En fin, es un filme raro, con buenos actores, correctamente hecha, pero con una trama que no es para cualquier espectador, por lo menos no para aquellos que prefieren filmes más decantados y más claros en sus narraciones. 08-01-2015.